Sandia | Delincuentes intentan asaltar vehículos de transporte

A pesar de los esfuerzos por combatir la delincuencia, varias unidades de transporte que se desplazaban desde la selva de la provincia de Sandia hacia la ciudad de Juliaca se enfrentaron a otro intento de robo en las primeras horas del 31 de agosto. Un vehículo gris persiguió a los autobuses a lo largo de la ruta Sandia-Cuyocuyo-Muñacruz, utilizando tácticas similares a un robo reciente que ocurrió en la madrugada del domingo 27 de agosto. Sin embargo, el plan de los delincuentes fracasó ya que todas las unidades, con pasajeros sospechando lo que podría ocurrir, tomaron precauciones y se detuvieron en la estación de servicio de Cuyocuyo. Este incidente se informó a la comisaría local de Sandia para tomar medidas y llevar a cabo un plan de acción.

Según los pasajeros, el vehículo gris siguió a todas las unidades desde Sandia, y cuando surgieron sospechas, los pasajeros se detuvieron en la estación de servicio de Ura Ayllu. El vehículo sospechoso continuó hacia Juliaca, pero en el desvío hacia Puna Ayllu, apagó sus luces y trató de esperar a los autobuses. Los intentos de comunicación con la Policía Nacional de Sandia no tuvieron éxito, y se presumió que podrían estar ocupados con las celebraciones de Santa Rosa de Lima.

Los viajeros también señalaron que todos los vehículos se congregaron en este punto y alrededor de las 3:50 a.m. llegaron más vehículos de Alto Inambari y Sandia. Pasaron juntos por Muñacruz, donde se observaron montículos de piedra que aparentemente eran utilizados para asaltos. A través de este comunicado, se hace un llamado a las autoridades que conforman el Comité Provincial de Seguridad Ciudadana de Sandia (COPROSEC) para que actúen y pongan fin a estas actividades delictivas.

Es importante mencionar que en ocasiones anteriores, este tipo de incidentes fueron informados a la Policía Nacional de Sandia; sin embargo, se habría alegado que no tenían combustible, faltaban neumáticos y que no se habían realizado cambios de aceite en los patrulleros, entre otras excusas, para no brindar seguridad. Esto coloca a los ciudadanos que viajan de noche en peligro y pone en riesgo tanto sus vidas como sus pertenencias, que han sido adquiridas con mucho esfuerzo para prosperar en la vida.